domingo, 24 de diciembre de 2023

IGNACIO FERRÍN

 ASTROFÍSICOS VENEZOLANOS

IGNACIO FERRÍN



Por: Orlando Escalona

Cortesía de la revista Quibario (CIDA)

Astrónomo venezolano nacido en Vigo, España, el 30 de agosto de 1942. Tenía ocho años cuando se preguntó sí la luz de su linterna podría llegar a las estrellas del firmamento que observaba. En ese instante se incuba en él la pasión por la Astronomía. Hizo sus estudios de pregrado en Física en la Universidad Central de Venezuela, de donde egresa en 1968; obtuvo su grado de PhD. en la Universidad de Colorado (USA) en 1976. Profesor de reconocido prestigio en el mundo de la Astronomía y la Astrofísica, Titular (Jubilado) de la Universidad de Los Andes (ULA) donde ha desempeñado con pasión su rol de docente, investigador y divulgador científico. Fue miembro fundador del Grupo de Astrofísica Teórica (GAT) del Departamento de Física, Facultad de Ciencias (ULA), primera institución académica formalmente creada en el país para la docencia e investigación de la Astrofísica, y primer profesor acreditado en el dictado de los cursos de pregrado de Astronomía y Astrofísica. 

    Tutor de innumerables tesis de pre y postgrado, así como de trabajos de ascenso del personal universitario; ha sabido compartir su quehacer de docente e investigador con el de ameno conferencista en los espacios académicos nacionales e internacionales. Ha arbitrado artículos, revistas y proyectos de investigación propuestos por sus pares en diversas instituciones académicas a nivel nacional. Innumerables trabajos de ascenso de profesores universitarios, tesis de grados y concursos de oposición se han sometido a su meticulosa evaluación. 


Conferencia: "CÓDIGO ROJO: Este no es un ejercicio. Un asteroide va a caer sobre mi ciudad ¿Qué voy a hacer?" dictada por el Dr. Ignacio Ferrín el 2 de julio del 2023. Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=gxFOUw_orw8

    Es autor de más de 50 artículos en revistas de investigación en astronomía. Impulsado por la fiebre incurable de escrutar las maravillas del universo, como él mismo ha mencionado, desde 1966 ha emprendido proyectos para la búsqueda de cometas, supernovas, novas, asteroides y planetas del Sistema Solar. Desde entonces, ha acumulado más de 1500 noches de observación, realizadas con instrumentos de todos los tamaños y tipos, que le ha permitido coleccionar más de 11.000 imágenes fotográficas astronómicas tomadas con cámaras convencionales y digitales CCD (Charge Coupled Device o Sistema de Acoplamiento de Cargas) del Observatorio Astronómico Nacional (OAN) de la Fundación Centro de Investigaciones de Astronomía "Francisco J. Duarte" (CIDA). En 1996 participó en el Proyecto QUEST (Quasar Equatorial Survey Team, Equipo de Búsqueda de Cuasares Ecuatoriales) de las universidades de Yale, Indiana (EU), ULA y CIDA. Realizó aportes significativos al tema de los anillos de Saturno por ser un investigador consumado al estudio de los procesos cometarios y meteoríticos del Sistema Solar. Reportó, en trabajo cooperativo con Carlos Leal, la existencia de 12 asteroides algunos de los cuales ya tiene nombres (Vigo, Carora, Simonrodriguez, Eduardorohl, Cesarmendoza, Humfernandez, Polidamas y Marcelroche), y el 31 de mayo del año 2000 descubrió el planeta enano 2000 EB173 HUYA. 

    Su experiencia académica está plasmada en la literatura pedagógica siguiente: "Notas de Introducción a Las Atmósferas Estelares", "Introducción a la Astronomía", "Notas de Astrofísica General", "Técnicas Observacionales, “Atlas de Curvas de Luz de Cometas Periódicos”, "¿Que es el Método Científico?", "Manual Para La Observación Científica de los Cometas", Partes I y II", capítulos de textos para los laboratorios docentes de física, entre otros. Fue creador, editor y articulista en 40 números de la revista Universo y editor del Boletín de la Sociedad Venezolana de Física. Entusiasta de la observación astronómica tanto, especializada en el OAN, como amateur en el observatorio privado de su residencia, o durante múltiples excursiones realizadas bajo su batuta en las altas mesetas y picos merideños. 

    En junio del 2013, basado en el patrón observado de las curvas de luz de cometas desintegrados antes, predijo acertadamente la desintegración del cometa ISON al pasar por el perihelio solar, contrario a lo expuesto por la comunidad de astrónomos internacionales. 

    Hoy en día se desempeña como profesor-investigador en la Universidad de Antioquia, Medellín, Colombia.

viernes, 22 de diciembre de 2023

Astrónomo digitalizado

 


Reflexión del astrónomo digitalizado
 


He alcanzado la cúspide de la indiferencia en las celebraciones astronómicas. Lo que pase en el cielo ya no me motiva. ¡Qué se caigan las estrellas, los astros y cometas! Esas celebraciones se pierden entre tantas más de los cientos de fechas diarias de eventos nacionales e internacionales. Un simple "afelión" o un "perihelión" más no me dice nada; ¡qué me importa que la Tierra esté cerca o esté lejos del Sol!, sí aquí donde hago vida cotidiana no siento sus efectos. !Adiós afelión!, !hasta nunca jamás perihelión! ¡No se te ocurra volver, solsticio de diciembre!, ¡tampoco tu, equinoccio de junio! Y tú “sombra cero”, cuando llegues el 31 de agosto y el 11 de marzo no me presentes tus bobadas, porque voy a ser el primero en hacerte sombra para que la sombra que no das el mediodía solar, no se te de nunca más. Invocaré al viento y las nubes ese día; hasta la noche sí es preciso, para que tu sombra se pierda en las penumbras. Sí fuera posible, llevaría la Luna al mismo Sol ese día “sombra cero” a las 12:46, aquí donde estamos, y tus efectos se adormecerán entre la oscurantina de la noche-día.

    Adiós sol de la mañana, sol de mediodía, sol de los ocasos. Me despido de los equinoccios y solsticios, adiós mediciones del inútil gnomon. Nada de hora de reloj solar, sí ahora dispongo en mi muñeca del mágico ingenio temporal “smartwatch” multifuncional pro. ¡Hasta el tiempo en que no te vuelva a ver, opacos rayos de luna!

    Perdí totalmente el interés por los eventos naturales, para eso tengo aplicaciones en mi smartphone y puedo contemplar el Universo todo, en mi pequeño mundo digital; hasta lo puedo ampliar en mi ultra pantalla plana digital.

    ¡Ahora me extasío en mi maravilloso mundo automatizado! Soy un feliz astrónomo digitalizado.”


jueves, 21 de diciembre de 2023

El solsticio

 El solsticio de diciembre

Desde la formación del sistema solar, la Tierra ha jugueteado alrededor del Sol, e inclinada 23,5 grados respecto a la vertical al plano de su órbita elíptica, le ha rendido la pleitesía que merece por toda la energía útil que de él ha recibido, como se ilustra en la figura 1. Y podría seguir así año tras año, sin parar, a menos que algún evento astronómico catastrófico lo impida.


Figura 1. Movimiento de la Tierra alrededor del Sol a lo largo de su órbita elíptica (casi circular, la elipticidad que se muestra es producto de la perspectiva de la imagen). El eje de la Tierra forma un ángulo de 23,5 grados con la línea vertical al plano de la órbita. Durante el solsticio del 21 de diciembre el eje terrestre se inclinará más hacia el polo sur del Sol. Por lo tanto, el Sol bañará al hemisferio sur con luz de mayor intensidad, comparado con el hemisferio norte.  Consecuencia: invierno en el norte y verano en el sur. Con los botones de Inicio y Pausa se puede controlar el applet. 

Mientras nuestro insólito planeta Tierra realiza su periódico viaje de traslación por el Sistema Solar, ocurren varios eventos astronómicos a lo largo del año que vale la pena destacar. Cuatro de estos son de fundamental importancia en la climatología global, porque originan las consabidas estaciones: primavera, verano, otoño e invierno. Entre las mencionadas, socialmente destaca la estación invernal del hemisferio norte (HN) por la celebración de la Navidad, la finalización del Año Viejo y el recibimiento del

Año Nuevo, según el calendario gregoriano. 



Figura 2. Sistema de coordenadas ecuatoriales para determinar el movimiento del Sol sobre su trayectoria aparente en la esfera terrestre conocida como eclíptica. El plano de la eclíptica forma un ángulo de 23,5 grados respecto al plano de ecuador celeste, y se interceptan dando origen al punto Vernal ϒ o punto de Aries y el punto Boreal Ω. Este valor determina la oblicuidad de la eclíptica. La esfera grande de color azul representa la esfera celeste, la del centro a la Tierra y la pequeña sobre la eclíptica, al Sol. Se pueden observar las posiciones del Sol para los meses del año.

Pulsar sobre la imagen para activar el applet que simula el movimiento del Sol sobre la eclíptica. El Sol se puede mover también con el botón de Inicio o colocando el cursor encima y desplazándolo.

La época de la Navidad siempre coincide con la ocurrencia del solsticio de diciembre, que este año tendrá lugar a las 11:27 pm (HLV) del día de hoy 21 de diciembre de 2023.  Este es el evento astronómico que marca el inicio del invierno en el hemisferio norte y, al mismo tiempo, el verano en el sur. Este fenómeno astronómico de los solsticios ocurre dos veces al año (junio y diciembre), cuando la inclinación del eje de la Tierra hace que el Sol alcance su máxima altura en el cielo, bien sea en el hemisferio norte o en el sur. En este caso particular del solsticio de diciembre, el extremo norte del eje terrestre se encuentra inclinado en sentido contrario al Sol, mientras que su extremo sur se encuentra tumbado hacia el Sol. En consecuencia, sobre el hemisferio norte incide la luz del sol con menor intensidad que en el hemisferio sur.

 Nosotros, en nuestra patria venezolana, estamos ubicados en el hemisferio norte de la Tierra, en la zona intertropical delimitada por el trópico de Cáncer y el trópico de Capricornio. Por consiguiente, los cambios estacionales que se producen en las regiones distantes del ecuador terrestre (es decir, aquellas que se encuentran más al polo norte o más al polo sur), directamente no nos afecta significativamente; sin embargo, nos parece conveniente, seguir estos eventos astronómicos y climáticos que se producen a lo largo del año en nuestro país a causa de tal movimiento anual de la Tierra, para poder tener un conocimiento preciso de porqué no se dan las cuatro estaciones en nuestro territorio; entre otras cosas.



Figura 3. Posición del Sol durante el solsticio de diciembre 2023. Este año, el 21 de diciembre a las 23:27 (HLV) el Sol se encontrará en el cenit de un punto de Australia, como se puede apreciar en la figura 3. En ese preciso lugar  ocurrirá también el "mediodía cenital". Cualquier observador ubicado en ese punto podrá disfrutar de la desaparición de las sombras de los objetos. Pulsar sobre la imagen para activar el applet que simula el movimiento del Sol sobre la eclíptica. El Sol se puede mover con el botón de Inicio o colocando el cursor encima y desplazándolo.

¿Por qué ocurren estos eventos astronómicos? Muy simple, la Tierra, mientras se desplaza alrededor del Sol, también gira; y lo hace como un trompo o peonza. Por lo tanto, posee un momento angular de rotación en una dirección fija, es decir, aproximadamente constante respecto al fondo de la bóveda celeste. Una ley de la física permite concluir que, mientras la Tierra se desplaza en su órbita, este momento angular mantiene su dirección, a menos que una fuerza externa le aplique un torque y se la cambie. Tal dirección del momento angular se considera en astronomía como una dirección de referencia y, por lo tanto, se adopta como la dirección del eje de la Tierra; el cual, uno de sus extremos (el norte), apunta hacia la estrella Polaris en la Constelación de la Osa Menor. Pues bien, resulta que por un motivo que no explicaremos, el eje forma un ángulo de 23,5 grados con la línea vertical al plano de la órbita que la Tierra describe y como se acaba de mencionar, su dirección permanece casi constante.

    Sí la Tierra se moviera alrededor del Sol con el eje terrestre en dirección perpendicular al plano de la órbita terrestre, entonces, el plano de su órbita coincidiría con el plano del ecuador; y por consiguiente, la luz recibida desde nuestro astro rey, iluminaría por igual ambos hemisferios terrestres los 365 días del año. Justamente, esta es la situación que ocurre durante los dos equinoccios de marzo y septiembre. En consecuencia, cualquier observador sobre la superficie  de la Tierra, durante todo el año, verían salir al Sol exactamente por el punto cardinal Este, subiría hasta alcanzar la altura máxima de 90 grados en el cielo, y luego, lo verían ocultarse por el punto cardinal Oeste.

    Es decir, el Sol realizaría cada día el mismo movimiento aparente monótono para un observador situado sobre la línea ecuatorial terrestre; lo mismo ocurriría sobre los trópicos,  y en general, sobre cualquier punto de la superficie terrestre.  

    Sin embargo, este no es el caso, ya que el eje de la Tierra forma un ángulo de 23,5 grados con la línea vertical al plano de la órbita. Durante el solsticio del 21 de diciembre el eje terrestre se inclinará más hacia el polo sur del Sol. Por lo tanto, el Sol bañará al hemisferio sur con luz de mayor intensidad, comparado con el hemisferio norte.  Consecuencia: se produce el invierno en el hemisferio norte y el verano en el sur.